Una Colorada (vale más que cien descoloridas) | Los sujetos

“Si usted es un ciudadano pensante, no solo critique”

Lilia Cisneros Luján*

La experiencia vital me ha enseñado que las acciones siempre tienen un sujeto, no suceden por casualidad, no pasa que de pronto a alguien se le ocurre matar a Kennedy, Colosio o Cristina. Siempre existe una persona o grupo quien discurre un determinado acto que nos sorprende –hace 30 años en Argentina murió casi una centena de personas debido a atentados terroristas-  como en el caso de la semana pasada, en que el partido oficialista organizó la manifestación multitudinaria de apoyo a una alta funcionaria del gobierno luego de mirar en su cara la pistola que se supone debía matarla. ¿Por qué hay quien piensa que todo fue un acto de propaganda? ¿Cómo sería la Argentina de izquierda, si la bala hubiese salido del arma?

Como resultado de la multiplicación de gobiernos calificados de populistas –de izquierda y derecha- hechos dramáticos se multiplican y más que intentar resolverlos, los gobiernos ocupan energías para convencer a los gobernados que no se trata de terrorismo, que el crimen –calificado de organizado- no tiene tanto poder y que las autoridades electas hacen lo necesario para poner remedio. ¿Piensa usted que algunos o todos los lamentables hechos, con muertos de por medio, que ocurren en México, caen en alguno de esto supuestos? ¿De quién sospecha: de los carteles? ¿Cree usted que tales tragedias se dan por luchas territoriales entre los muy malos? Y hablando de gobiernos, ¿estos son sujetos activos o pasivos?

En medio de esta realidad de enfrentamientos en todo el mundo, inició en mi país el mes de la patria. Hay cohetes, mucho viva México, verde blanco y rojo, gran felicidad, todos nos sentimos orgullosos de ser mexicanos. Es la ocasión para muchos comerciantes informales, de hacer su agosto. Se venden banderas tricolores, aun cuando la mayoría sean chinas y de muy dudosa calidad, pocos analizan dichos quizá trascendentes [1] y poco importa que falten 120 semanas para el fin del sexenio, que el 22 de este mes inicia el solsticio de otoño y que el 30 comienzan las precampañas. De la sorpresa que nos prometieron para el día de la patria, no hablamos, al parecer ya se adelantó tanto la participación del presidente de Cuba en los eventos, como la aprobación vía rápida de las modificaciones legislativa propuestas para el desempeño de la guardia nacional ¿Qué significa mantener su carácter civil, cuando financiera, administraba y operativamente depende de la Secretaria de la Defensa? ¿Se entretendrá a la SCJ, en la resolución de amparos de cualquier tipo, porque en realidad lo que se busca es ganar tiempo? ¿A qué se dedicarán los miembros de las porras institucionalizadas mientras esto y muchas cosas más ocurren?

Si busca en el Internet, el significado de porra, lo primero que aparee son las militares definidas como textos que se entonan al correr o marchar, sin la existencia de un acompañamiento[2], algunos de dichos textos son ofensivos y amenazantes –en contra de las mujeres, los civiles o el enemigo- y otros parecen heroicos. Al parecer no hay porra genérica, las hay, de cumpleaños, de fiestas, de amigos o deportivas cuyo objetivo es animar a un equipo a fin de reiterarle la motivación necesaria para ganar. ¿Por qué en las escuelas se denomina porros, a los sujetos de grupos –con consignas o no- generalmente dispuestos a la violencia y la destrucción? ¿Qué intereses les mueven? ¿De verdad solicitar la destitución de un maestro o autoridad es un objetivo bastante para cerrar y vandalizar salones, e instalaciones ajenas? ¿Quién está interesado en promover desordenes con porras en la UNAM?

En mi juventud aprendí que es mucho el dinero que se mueve detrás de los porros. Los conocí en la preparatoria, trataban de convencerme de que no hay votaciones limpias en las elecciones para sociedad de alumnos y que me estaban metiendo “balazos”; y sí me ganaron con votos falsos, protesté, aunque no sabía cuáles eran los procesos adecuados y esa fue la base de mi actividad de análisis político. En la UNAM, estuve cerca de los que pedían la destitución de nuestro director y los que presionaron para la renuncia del rector Ignacio Chávez, algunos de ellos aun andan por ahí, pero yo terminé mi carrera con la seguridad de que la violencia, sea quien sea quien la pague no es el camino para resolver los problemas.

Mis nietos, quisieron conocer mi opinión sobre los chalecos amarillos en Francia, les compartí mis experiencias y cuando fueron a invitarlos a participar –estaban en preparatoria- ellos preguntaron quien los patrocinaba, cuáles eran las intenciones y luego de una conversación con información de por medio, se dieron la vuelta y nunca más regresaron.

Así como en argentina o en Brasil, los aspirantes a gobernar promueven porras en sus campañas, también en otros países hay porras a veces son violentas o simplemente masas de ciudadanos desinformados que, debido a su pobreza, son manejados como si fueras mascotas condicionadas para repetir a coro lo que se les ha indicado. Si usted es un ciudadano pensante, no solo critique; averigüe quienes están detrás de lo que obviamente suena a mentira y demagogia, y actúe en consecuencia, sin ponerse en el lugar de los perversos que además e todo usan su dinero aportado al fisco para continuar en el poder.

*Abogada. Emprendedor social de Ashoka. Instituto para la Atención Integral del Niño Quemado (IAINQ)

**Las opiniones plasmadas en las colaboraciones son responsabilidad de cada autor, así como su estilo de escritura. Ecodiario Zacatecas sólo es una plataforma digital para darlas a conocer a sus lectores.