Los misterios de la existencia | El diferente
“El pudiente” *
Alex Bravo*
Para algunos doctores, la experiencia de soledad es un “síntoma” que se incrementó en personas que durante la pandemia habrían enfermado de covid-19, pero lo cierto es que la sensación de sentirse solo, ya estaba presente en cada persona, desde antes de enfermarse y que llegara la pandemia.
En una encuesta realizada por un grupo de investigadores de la UNAM el año pasado, señaló que, en México, 7 de 10 personas, se experimentan solas, vacías y con frecuentes episodios depresivos, la ciencia dirá también que son las personas de la tercera edad, quienes más solas se experimentan, por la manera en que como sociedad se trata a las personas “viejas”, pero curiosamente en dicho estudio, fueron los jóvenes, quienes se sienten más solos.
¿Cómo es que ocurre esto? Porque en una sociedad donde abundan las redes sociales, la experiencia de soledad, es marcada como un estigma, algo así como mal vista, y contrasta un cierto fracaso personal. Para Noreena Hertz (escritora y economista inglesa) la Soledad es un estado interior y al mismo tiempo existencial, es decir, un estado personal, social, económico y político, por ende, las redes sociales son solo un medio de un enorme rompecabezas.
La experiencia de soledad, está alentada por la demografía, el alta en los precios de la canasta básica, la exclusión de ciertos lugares por no cumplir con los requisitos necesarios para pertenecer, la aceleración con que la tecnología avanza cada vez más rápido, sumado a las mismas políticas y leyes de nuestro país que parecen son todo, menos equitativas, y que favorecen solo para los que más tienen, para quien puede llegar a ser “El pudiente”.
Por lo tanto, existen lugares que son construidos para el encuentro con el otro, pero para pertenecer, se debe cumplir con una serie de requisitos que se convierten en algo así, como un proceso selectivo de quien, sí puede y quien no, formar parte de algo, quien es aceptado, sin duda deberá aprender a convivir según las normas establecidas, pero quien no, deberá ir por la vida, con la marca, del “diferente”.
Sin duda, se debe hablar de la discriminación que se fomenta en una sociedad que en teoría se ha vuelto moderna y estructurada, pero también que es la misma consecuencia de toda esta modernización que parece ha obligado a que de pronto, sea uno mismo quien quiere estar solo, así que esta persona opta por aislarse y dejar de hacer cosas que impliquen una interacción social ¿cómo se llega a esta conclusión? Porque de pronto, después de sentirse varias veces excluido por ser quien se es, termina convenciéndose así mismo que es solo él o ella, quien puede entenderse, amarse, y que su única garantía es mejor estar solo, antes de tener que volver a experimentar de otros, el rechazo. Como dice el dicho, “mejor solo que mal acompañado”. Yo pienso que es mejor aislarse que relacionarse de manera mentirosa.
Mi nombre es Alex Bravo y cuento con la formación como Terapeuta Existencial y solo quiero externarte, que si en un momento, sientes que algo no va bien y que frente a lo que sea que estés sintiendo, no estás sola, no estás solo. Ya sea a distancia o de manera presencial, estoy con la mejor disposición de escucharte y leerte.
Hasta la próxima.
*Terapeuta Existencial
Correo: cypesc@gmail.com
*Las opiniones plasmadas en las colaboraciones son responsabilidad de cada autor, así como su estilo de escritura. Ecodiario Zacatecas sólo es una plataforma digital para darlas a conocer a sus lectores.
