Hablemos de seguridad… y algo más | Elementos básicos de una política pública en prevención
“…uno de sus objetivos de cualquier plan o programa de prevención es reducir la vulnerabilidad ante la violencia…”
Diego Varela de León*
La convivencia implica un respeto a la vida e integridad de las personas, así como a sus derechos y libertades; la historia nos muestra variadas e innumerables estrategias para mantener el orden y la paz; imagina una sociedad donde no existieran mecanismos de control, donde cada uno impusiera su ley, y seguramente pensaste en algún pasaje de la historia donde imperaba la ley del más fuerte. Afortunadamente y por el bien de la humanidad hemos evolucionado, ahora formamos parte de una sociedad que busca en su conjunto alcanzar esa tranquilidad de poder caminar de día o de noche con libertad y seguridad.
Los fundamentos sustantivos de una política pública de prevención social de la violencia y la delincuencia en nuestro país se concentran principalmente en tres instrumentos normativos tales como Ley General de Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia, el Plan Nacional de desarrollo, así como el Programa Nacional para la Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia, a su vez los gobiernos de los estados y municipios tendrán que ceñirse a estos instrumentos amen de los propios que se instrumenten desde lo local de acuerdo a las características propias de la realidad de cada entidad.
De acuerdo con lo anterior enunciamos algunos de los elementos básicos que deberán de contener dichos planes y programas para que puedan tener efectos positivos en lo que deseen y sin duda una de las etapas indispensables de las políticas públicas es el diagnóstico. Se trata de una etapa en la que se busca, organiza, integra y analiza información que permite identificar las características del problema o necesidad al que va a responder la acción pública que se va a implementar, lo ideal es que amen del diagnóstico inicial, este deberá de actualizarse continuamente, puesto que los problemas públicos son complejos y cambiantes.
Sin duda uno de sus objetivos de cualquier plan o programa de prevención es la de “Reducir la vulnerabilidad ante la violencia y la delincuencia de las poblaciones de atención prioritaria”, para promover el desarrollo de acciones dirigidas a generar y fortalecer factores protectores para niñas y niños; adolescentes y jóvenes; mujeres, población migrantes y población interna en el sistema penitenciario, por ello la intervención focalizada es una estrategia que se opera para identificar zonas de intervención específicas y que es a partir del diagnóstico y la realización de una cartografía de seguridad, se identifican las delimitaciones territoriales o poblacionales con mayor índice de delincuencia y/o presencia de causas y factores de riesgo, a las cuales de manera común se les llama polígonos y es ahí en donde se priorizan acciones de prevención social.
En el mismo sentido cuando se realizan estrategias para la prevención de la violencia, es por demás importante identificar en qué nivel sea primario, secundario o terciario podemos ubicar el diseño de la intervención, porque de eso dependerá el tipo de acciones, los actores involucrados y el presupuesto designado, igualmente y no menos importante que los anteriores elementos es definir los tipos de intervención de la política de prevención, asimismo no se puede dejar de lado la coordinación interinstitucional y para una adecuada prevención es por demás necesaria la participación de representantes de distintos ámbitos en sus particulares competencias donde se priorice la focalización de recursos en los polígonos de intervención definidos en el marco del programa que se halla de implementar, y por último y además muy necesario que en toda política de prevención social promueva el desarrollo de estrategias que involucren a la sociedad en general e iniciativa privada, pues la seguridad deberá plantearse como un bien que deberá ser construido de manera corresponsable por distintos actores tanto gubernamentales como sociales y si, solo si, se logran conjuntar los elementos enunciado combinados con algunos otros elementos criminológicos, se podrán aspirar a conseguir mejores estadios de seguridad y armonía y paz social.
