El sentido del derecho "In actu" | Sobre el formato de las glosas de los informes gubernamentales
“La Soberanía reside en el pueblo y no en el gobernante” -Jean Bodin
Oscar Gabriel Campos*
El pasado 3 de octubre y hasta el día de hoy, si es que no sucede otra circunstancia, se está llevando a cabo el ejercicio democrático de rendición de cuentas. Derivado de que el 8 de septiembre anterior, el gobernador constitucional del Estado de Zacatecas, Licenciado David Monreal Ávila presentó ante la legislatura local y ante cientos de zacatecanos su Tercer Informe de Gobierno, en apego al artículo 59, segundo párrafo de la Constitución Política del Estado Libre y Soberano de Zacatecas, que a la letra dice:
“En las sesiones ordinarias de la legislatura, correspondientes a la primera quincena del mes de octubre de cada año, comenzará la glosa del informe, a la que acudirán los titulares de las dependencias y entidades de la Administración Pública Estatal, para contestar los cuestionamientos que los diputados les formulen sobre el contenido del informe”.
Los funcionarios gubernamentales de la entidad zacatecana, comparecen ante los legisladores locales para ser objeto del escrutinio político. Acuden a la representación popular a la “Casa del pueblo”, por ende, existe el acceso a dichas sesiones, al público en general además son transmitidas a través de las redes sociales del Poder Legislativo del estado.
Sin embargo, nos preguntamos ¿generan el interés de la ciudadanía? podríamos medir por lo menos, a través de las herramientas tecnologías, el porcentaje de personas que estuvieron atentas de manera virtual, mínimamente en la materia de su interés. Se tratan temas sociales, gobernabilidad, seguridad, educación, salud, campo, desarrollo económico, turismo, obras públicas, desarrollo urbano, vivienda y ordenamiento territorial, grupos vulnerables, mujeres, zacatecanos migrantes, desarrollo social, o la propia función pública.
Es una buena oportunidad para que la ciudadanía, de manera libre, realice un análisis del quehacer gubernamental, ojalá en un futuro se piense en un formato que permita a los ciudadanos, hacer propuestas, sugerencias, críticas constructivas, incluso reconocimiento de las dependencias convocadas a rendir cuentas, todo con el objeto de mejorar las buenas prácticas de los servidores públicos por estos medios de evaluación.
Las glosas legitiman el ejercicio democrático de transparencia y rendición de cuentas de los servidores públicos de primer nivel, sin embargo, algunos lo hicieron ante el pleno y otros ante las respectivas comisiones, esto nos señala que en el poder legislativo no a todos se les midió con la misma vara, pues para el quórum legal para sesionar en comisiones el mínimo de diputados presentes son 2 y en pleno 16, sustancial diferencia ¿el por qué?, deberá estar fundado y motivado, como lo reza la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos artículos 14 y 16.
Debemos convocar al debate público, que permita la evaluación con parámetros certeros del quehacer gubernamental, de frente a la ciudadanía.
Un formato más dinámico, ágil, con sustancia, con mensajes claros y precisos, con balances de ingresos y gastos de fácil consulta, con contenido sólido, para que la rendición de cuentas cada vez sea más transparente, es decir que permita subir la información ante la vitrina pública.
La rendición de cuentas la entendemos como la obligación de reportar, explicar o justificar algo, por ello nos lleva al ejercicio de responder preguntas. En pleno siglo XXI, donde la apertura es la exigencia, el México de hoy demanda lo que Rousseau nos legó, el bien general por encima del particular, así lo estableció en su contrato social, por eso se requiere el compromiso de las autoridades legislativas para generar normas eficientes, que fortalezcan este sano ejercicio democrático.
Recordando siempre que los gobernantes tienen la obligación de rendir cuentas, derivado de la delegación o del mandato popular que recibieron a través de las urnas en las elecciones que realizó la ciudadanía por medio del voto, libre, secreto y directo.
Y evocando nuevamente el principio de correspondencia como es arriba es abajo, como es abajo es arriba” el Kybalión, de Wiliam Walker, que, el caso local, sea lo mismo que para lo federal.
“Ubi labor - ibiuber / Donde hay trabajo hay abundancia”.
*Abogado y librepensador
