DENUNCIAN HOSTIGAMIENTO Y AMENAZAS CONTRA MUJERES EN VILLA DE COS
TEXTO Y FOTO: MARCOS VALDEZ
ZACATECAS, ZAC.- Mujeres de la comunidad El Capirote, en el municipio de Villa de Cos, denunciaron hostigamientos y amenazas de parte de algunos de sus vecinos por razones políticas, llegando incluso a la intimidación de un supuesto “comandante” de un grupo criminal en contra de ellas.
Tras levantar su denuncia en el Centro de Justicia para las Mujeres, las mujeres mencionaron que este problema se originó luego de ser elegidas como el nuevo Comité del Agua de la comunidad, el cual siempre fue integrado por hombres a quienes acusaron de hacer cobros indebidos y sin justificación a los habitantes de El Capirote.
Sin embargo, señalaron que el expresidente del anterior comité, Armando Hernández González, junto con otras 13 personas más, comenzaron a ejercer violencia de género en contra de las integrantes actuales, como son insultos, acoso, hostigamiento y amenazas en su contra, “que porque somos mujeres y no valemos, no servimos”.
Según las afectadas, Hernández González acudió a la casa de una de las integrantes acompañado por sus familiares y un sujeto armado, que se identificó como un integrante de un grupo del crimen organizado, para intimidar a las mujeres y exigir su renuncia al comité, cuyos puestos fueron otorgados por vía democrática entre los vecinos de la comunidad.
Dichas amenazas llegaron al punto de advertir que en caso de no ser atendidas sus exigencias, “levantarían” a alguno de los hijos de una de las integrantes del comité.
En su denuncia también mencionaron la participación del exdiputado local y actual regidor de Villa de Cos, Juan Carlos Regis Adame, quien nombró a dos abogados para invalidar sus puestos como integrantes del Comité y devolvérselos a los acusados.
“Es una comunidad lejana en el Semidesierto, y son usos y costumbres y lo entendemos así. A veces las costumbres se hacen tradición, pero el respeto debe siempre de privar ante todo. Sea mujer o sea hombre, el respeto debe de privar y es lo que vamos a enseñar a nuestros hijos y a las futuras generaciones… Somos una comunidad pequeña y podemos ser una gran familia que estemos al pendiente unos de otros”, comentó una de las denunciantes.