Sociedad transparente | El poder de la transparencia es de los ciudadanos
“... que en México el poder de la transparencia siga siendo de los ciudadanos”
Fabiola Torres Rodríguez*
La transparencia enfrenta un momento crítico en nuestro país. No es sólo hablar de instituciones como los organismos autónomos que la defienden y que hoy se enfrentan a la amenaza de desaparecer, sino también se trata de un poder que la ciudadanía ha construido y que le ha permitido lograr grandes conquistas a lo largo de dos décadas.
En Zacatecas fue primero la Comisión Estatal para el Acceso a la Información Pública (CEAIP), que evolucionó después al Instituto Zacatecano de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Iza), un organismo que hoy la ciudadanía conoce, visita y utiliza para su beneficio.
No sólo lo dicen los servidores públicos de este organismo, lo dicen los ciudadanos.
Día con día, en las oficinas del Izai se recibe a padres de familia, madres solteras, familias completas, estudiantes, jubilados y personas con discapacidad. En un primer momento, desconocen los alcances de su derecho de acceso a la información, sin embargo, al salir del edificio llevan en su mano el recibo de sus solicitudes, realizadas a las dependencias gubernamentales encargadas de brindarles un expediente médico, una constancia de sus semanas cotizadas, los requisitos para acceder a una beca, por mencionar sólo algunas de las peticiones más frecuentes.
El ciudadano hoy conoce que, gracias a la obligación que tienen las instituciones de transparentar esta información, no necesita conformarse con un simple “no” por respuesta. Es por ello que diariamente la Unidad de Transparencia del organismo garante en Zacatecas, al igual que en cada entidad federativa, del país, atiende a personas que llegan por la recomendación de un hermano, de una vecina o por un testimonio en las redes sociales.
Este derecho que ha cambiado para bien la vida de miles de personas en México es un poder de la ciudadanía. Aún pese a resistencias y nuevos retos, el acceso a la información y la protección de datos personales han avanzado hasta convertirse en dos poderosas herramientas para conocer y ejercer otros derechos.
Afortunadamente, hasta hoy, las generaciones que en este momento se preparan para ser los futuros profesionistas, servidores públicos, padres de familia y ciudadanos, no han conocido un país sin los organismos que defienden su derecho a saber, un país con instituciones completamente cerradas y herméticas respecto a su actuar, sin nadie que las vigile.
Quienes en alguna manera hemos atestiguado y formado parte de la evolución de esta conquista social, reflexionemos y defendamos los organismos autónomos, que en México el poder de la transparencia siga siendo de los ciudadanos.
*Comisionada presidenta del Izai