Los misterios de la existencia | ¿Somos objeto de manipulación?
“La reacción emocional”
Alex Bravo*
Cuando era estudiante de secundaria, recuerdo que, al momento de hacer un examen, experimentaba cierto nerviosismo provocado al mirar que un compañero de grupo, se levantaba y entregaba su examen expresando que ya lo había terminado. Cuando miraba que le seguía otro compañero, y otro más, mi nerviosismo se incrementaba, acompañado con una especie de ansiedad por no poder terminar. Mi concentración ya no era la misma, y optaba por contestar al azar las respuestas que me faltaban o simplemente por negarme en contestar el resto.
Para algunos psicólogos, el sentimiento de fracaso, es algo que puede ser aprendido, y cuando se experimenta, puede uno mismo percibir furia, decepción y hasta frustración consigo mismo. Estos sentimientos consiguen llegar a ser fuente de ansiedad, por estarse repitiendo de manera constante ¿por qué no puedo yo hacerlo? Y aunque puedes tener otro intento la próxima vez, el resultado no cambia, sigue siendo el mismo, sin conseguir concretar la tarea, es entonces que la frustración se manifiesta otra vez, terminando en una especie de círculo vicioso. Algunas personas, pueden pasar el resto de su vida sintiendo que no son buenos para algo, pero ¿cómo es que ocurre esto? A través de la desconfirmación .
Un niño puede decirle a su maestro de primaria que lo que le están enseñando está mal, porque su papá se lo había explicado de otra manera, el maestro puede responderle que está mal el niño y también su papá, desconfirmando entonces su experiencia. Otro ejemplo, es cuando un niño le dice a su papá que no debe cruzar el semáforo cuando está en color rojo, porque es indebido y está mal, a lo que el padre puede responderle; “tú qué sabes, cállate la boca”, no solo habrá desconfirmado su experiencia, también le habrá callado de tal manera que el niño podría perder la confianza de hacer otro comentario. Es curioso imaginar que ese niño puede con el tiempo crecer, y entonces al momento de cruzar un semáforo también se pase aun estando en color rojo y si su hijo le llama la atención, el padre responda de la misma manera que lo hizo su padre con él, entonces esto se convierte en un círculo vicioso de desconfirmar al otro.
Desconfirmar al otro, es la forma más coloquial de decirle, tú, para mí no existes y entonces lo que tú me dices, me es indiferente. Basta que esto ocurra solo una vez, para que el otro mire su intento de comunicar algo, como un intento fallido y entonces en cuestión de segundos la confianza se puede ver rota, por el hecho de no poder concretar el acto, especialmente por compararse con los resultados de otros, sentimientos como la impotencia y la carencia de confianza en sí mismo, se suman al grado que uno puede de pronto no sentirse capaz de hacer algo más, cuando ocurre, ya no son los otros quienes lo desconfirman, sino que es el mismo.
Cuando uno es niño, es fundamental enseñarle a tener confianza y autoestima consigo mismo, eso no solo determinará cómo se relacionará una vez siendo adulto, o al momento de sentirse frustrado, no es nada fuera de lo común, todos de alguna manera lo experimentan en sus actos cotidianos, ya sea en la escuela, en el trabajo, el acoso laboral, hasta en las relaciones de pareja y en el ambiente familiar, pueden hacer que cualquier persona sienta que sus experiencias son negadas.
Mi nombre es Alex Bravo y cuento con la formación como Terapeuta Existencial y solo quiero externarte, que si en un momento, sientes que algo no va bien y que frente a lo que sea que estés sintiendo, no estás sola, no estás solo. Ya sea a distancia o de manera presencial, estoy con la mejor disposición de escucharte y leerte.
Hasta la próxima.
*Terapeuta Existencial
Correo: cypesc@gmail.com