Andar las vías | Amistades peligrosas
“Es de suma importancia cuidar con quienes nos relacionamos entre las llamadas redes sociales”.
Luna Morena*
Conforme vamos creciendo es válido seleccionar a las personas con las que queremos convivir y en quienes podemos confiar. Podemos tener muchos amigos, pero entre ellos están los amigos de doble raya que son como tus hermanos y a veces más que eso; porque muchas veces estamos viviendo lejos de la familia, y contar con unos amigos así ayuda micho en nuestro diario vivir, porque sabemos que podemos contar con ellos cuando lleguemos a necesitar ayuda, compañía, asesoramiento y refugio.
Podemos ser amigos de muchas personas, pero de esas personas únicamente dos o tres son nuestros amigos por el afecto de ida y vuelta, la confianza, el respeto, la simpatía y el gusto mutuo que en algunas cosas nos podemos identificar. Esto no quiere decir que la amistad será para siempre, porque suele pasar que con un mínimo detalle que no le agrade al querido amigo, al casi hermano todo puede cambiar, y de esta manera la cordialidad existente llegue a finalizar, olvidándose la lealtad, el compromiso, el apoyo y la sinceridad que por años en su amistad estuvieron ejerciendo-
No es tan fácil tener una amistad como uno la imagina, menos entre las redes sociales donde podemos ver a nuestros conocidos con un numero grande de dizque de amigos, porque a veces ni siquiera con los que están cerca podemos convivir, menos con los que uno cree tener entre ese medio tan extenso donde se puede socializar sin horarios, y hablar de todo lo que se nos pueda ocurrir a veces hasta el amanecer; y si la conversación no termina la seguimos camino a la escuela o al trabajo.
Aunque en los camaradas que encontramos entre los medios modernos de comunicación exista un compañerismo consolidado debemos evitar todo lo comunicable que solemos ser, porque no sabemos si es lo que creemos, y desconocemos si es una falsedad que se oculta tras un verbo aprendido, y lo que busca es una información para trabajar sus mañas. Es importante cuidar lo que comunicamos, la discreción suele ser una importante protección familiar, más cuando conversamos con uno de los miles dizque camaradas que tenemos en el Facebook, del cual nada sabemos, ni a que se dedica en sus tiempos libres. Mientras menos hablemos de las ocupaciones parentales ya sea de sus viajes, de sus actividades cotidianas, de su vida social, de sus compras y propiedades mantendremos reservada esa parte importante de nuestro vivir. Consanguíneo.
Es necesario tener cuidado con las redes sociales, estar alertas en aquello que podamos encontrar; claro que son bastante útiles y que bueno que existen de acuerdo al uso que cada quien les quiera dar; si para el trabajo diario, o para cuestiones azarosas. Si para actividades escolares, o para el fisgoneo desordenado. Para comunicarse con familiares, o para travesear en lo proscrito. Igual es antirreglamentario entablar un dialogo con personas que nunca habíamos visto, y que de pronto nos llaman para ser amigos pero con una postura convincente, tratable, particular y desde lugares que ni siquiera conocemos y tal vez nunca lleguemos a conocer; pero que en cuestión de minutos se convierte en nuestro gran cuate al cual le permitimos hasta disponer de nuestro tiempo con sus charlas extensas. Tanto que no nos damos cuenta lo dispuestos que estamos para servirle de orejas, luego de confidentes y más tarde partícipes de sus confidencias personales.
Es de suma importancia cuidar con quienes nos relacionamos entre las llamadas redes sociales, puesto que muchas veces se presentan con falsas caretas, y nombres engañosos. Antes de aceptar las peticiones de amistad que nos llegan, comuniquemos a nuestras familias, y tratemos de ubicar los perfiles, y los amigos con los que cuenta; porque ha ocurrido que esa línea contiene un código que delata los rasgos del interlocutor. Pero lo más conveniente es rechazar a todo el extranjero que pretende nuestra amistad; si conociéndolos a veces nos dan cada decepción, ahora sin conocerlos.
*Escritora, poeta y promotora y difusora de la cultura. Soy tres estuches de monerías y casi un montón de cosas.
**Las opiniones plasmadas en las colaboraciones son responsabilidad de cada autor, así como su estilo de escritura. Ecodiario Zacatecas sólo es una plataforma digital para darlas a conocer