FESTEJAN MAMÁS DE TODAS LAS EDADES SU DÍA
Texto y fotos: Gabriel Rodríguez
zACATECAS, ZAC.- Este 10 de mayo, las calles de Zacatecas estuvieron repletas de madres de todas las edades y condiciones sociales, dispuestas a celebrar su día, conmemoración que surgió en 1922 a causa de una solicitud hecha por el diario Excélsior de la ciudad de Méxicoa, las autoridades de entonces.
Este miércoles bajo un solazo de primavera, muchas de ellas estuvieron a desayunar y comer con sus amistades, hijos y nietos.
Pero no es menos cierto que muchas de ellas la pasaron solas y que en su caminar llevaba con pesar una solitaria flor entre las manos.
Otras estuvieron en los centros comerciales tratando de negociar con las vendedoras con el fin de mejorar los precios porque, así como están las cosas, la verdad es que a muchas ya no les alcanza para el fondo, el vestidito o las pantuflas.
En Bicentenario, decenas de ellas cruzaban con las frentes arrugadas y en otros casos simulando una sonrisa de no poder ocultar las ansiedades alusivas quizás a los convulsivos tiempos que les ha tocado vivir.
Aquellas que ahora tienen 80 o más, y que hace 20 lucían más jóvenes recuerdan con nostalgia los ayeres en que crecieron en una ciudad como la zacatecana en la que entonces se podía dejar abierta la puerta abierta por las noches y no pasaba nada.
Sus sueños sobre romances acaecidos no dejan de cercarlas sobre todo cuando la edad se les vino encima y ahora tienen que cuidar a sus nietecitos aun cuando, otras prefieren la vida en soledad y así sobrellevan achaques y enfermedades.
Sobre el jardín Independencia, algunas se dan el lujo de ya no regatear a los vendedores pues los objetos ahí expuestos en realidad no son caros sino sumamente accesibles a su magro nivel económico.
Rosticerías, pollerías y restoranes estaban ya llenos a eso de las 11 de la mañana, como en el caso del Villasunción donde había que esperar hasta media hora para pasar, pero no se escuchaban por ningún lugar los mariachis con los que la violencia vino a acabar.
Pues antes, dicen las que saben, las serenatas daban comienzo a las 10 de la noche de un día antes “y hoy -dijo una de ellas- lo único que escuchamos son los estrambidos (sic) de las ametralladoras”.
Es uno más de los días de las Madres en Zacatecas, y para quienes aún las tienen hay algarabía y gozo, pero quienes ya no las disfrutan lloran en silencio el hecho de haberlas visto partir sin más.
Así celebró Zacatecas este 10 de mayo y bien valdría recordar las sabias palabras que dijo ayer una mujer a este medio, tal lo cual lo cito: “Nuestro creador no quiere que seamos menos que los hombres, él nos ama mucho”.