APENAS UNA DE 10 FAMILIAS ACEPTA DONAR ÓRGANOS EN ZACATECAS
TEXTO Y FOTO: FERNANDO QUIJAS
ZACATECAS, ZAC.- En Zacatecas, de 10 familias que se entrevistan por los Servicios de Salud para una donación de órganos, apenas una acepta dicho procedimiento, lo que refleja la poca cultura que existe en cuanto a este tema en el estado, explicó en entrevista Marcela Ramírez Pacheco, coordinadora hospitalaria de Donación de Órganos y Tejidos.
Aseguró que no se trata de una falta de sensibilidad o empatía por parte de los zacatecanos, sino que "más bien no nos detenemos a través de nuestra vida a pensar qué queremos hacer cuando ya no estemos aquí".
"De hecho, a la familia es lo que le cuesta trabajo: tomar una decisión tan difícil en un momento tan doloroso como es la pérdida de un ser querido. Y realmente la demanda existe", destacó Marcela Ramírez.
De acuerdo con la coordinadora, debido a esta situación es que la mayor parte de personas que se encuentran en lista de espera "tristemente terminan muriendo, porque las donaciones son muy pocas".
Explicó que el tiempo de espera de un órgano puede ser de entre tres a cuatro años, sobre todo para quienes necesitan un riñón, que son los casos más comunes en el estado.
Marcela Ramírez mencionó lo anterior momentos antes de la ceremonia de inauguración de las jornadas por el Día Mundial de la Donación y Trasplante de Órganos, en la que las autoridades de Salud reconocieron a las familias que han aceptado dar vida a través de la donación tras la muerte de un ser querido, así como a las asociaciones y médicos que impulsan dicha práctica.
Mauricio Rojas Bermúdez, quién recientemente fue beneficiado como receptor de órganos para enfrentar la insuficiencia renal que padecía, la cual aseguró es una enfermedad que no le desea a nadie, consideró que la donación es el "mayor acto de amor", por lo que atesora "esta segunda oportunidad" que le fue entregada.
Amor de hermana
El amor de Marta María Morales Ávila hacia su hermana, Alejandra, la impulsó a compartir una parte de su cuerpo para ver crecer a su hermana luego de que algunos meses antes se le detectara insuficiencia renal.
Ahora, luego de ocho años, las hermanas originarias del Pueblo Mágico de Jerez sonríen y recuerdan con sentimiento el sacrificio que una de ellas hizo a sus 24 años de edad para compartir más años juntas, a pesar de la incertidumbre que existía en la familia por tomar una decisión de esa magnitud.
"No cambia nada... solamente hay que llevar una vida saludable y tener mucho amor por la gente, mucha empatía", comentó Marta María.