29 AÑOS REPARANDO PASOS: LA HISTORIA DE DON ABEL
TEXTO Y FOTOS: JOSÉ ARELLANO
FRESNILLO, ZAC.- En la comunidad Plateros, Don Abel Flores Vásquez se dedica al oficio de zapatero desde hace casi tres décadas, un trabajo tradicional que cada vez menos personas practican. A pesar de los desafíos, Don Abel continúa con su labor, un arte que pocos aún conservan en tiempos modernos.
"Lo importante es que la gente se va satisfecha con lo que hago, sin importar el tipo de calzado que me traigan. Mi objetivo es asegurarme de que cada par de zapatos quede en condiciones óptimas", comparte con una sonrisa. A lo largo de los años, Don Abel ganó la confianza de sus clientes, quienes saben que pueden contar con él para reparar desde un zapato de vestir hasta unos tenis deportivos.
Don Abel comenzó a aprender este oficio desde joven, en una época en la que había más competencia. Recuerda que en Fresnillo había más zapateros, pero con el tiempo la mayoría abandonó el oficio. Actualmente, solo quedan alrededor de cinco personas que siguen dedicándose a la zapatería en el municipio, aunque muchos de ellos deben complementar su trabajo con otros oficios para sostener a sus familias.
"A veces parece que el trabajo ha disminuido, sobre todo porque el calzado actual es de baja calidad. Las personas ya no reparan los zapatos, sino que los tiran cuando se dañan. La cultura del consumo rápido ha afectado mucho a nuestro trabajo", señaló Don Abel.
A pesar de todo, su taller sigue abierto todos los días. Comienza su jornada a las 8 de la mañana y termina después de las 2 de la tarde, reparando y restaurando diferentes tipos de calzado. "Es un trabajo que me gusta y me mantiene ocupado. Aunque los tiempos son difíciles, sigo aquí porque amo lo que hago y me siento orgulloso de preservar una tradición", afirmó.