Retazos de Ciencias Forenses | La investigación criminalística en los casos de suicidio
*Ignorantia juris non excusat
Nicolás Pinedo*
Si bien es cierto que el suicidio es considerado como la voluntad de la persona de terminar con su vida, usando cualquier medio disponible que tenga a su alcance, de ser así no amerita ninguna investigación, porque el autor ya terminó con si vida, en el caso de la investigación criminal que se hace por parte del ministerio público, la policía y los peritos, en esta se aprecia que existe urgencia por archivar el caso sin que se haga la investigación correspondiente, en el inicio de la investigación las hipótesis se agotan por el hecho de ser un probable suicidio.
Tal parece que, en el suicidio, ya no se genera nuevas líneas de interés para las autoridades encargadas de la investigación, con la causa de muerte es más que suficiente para que se cierre la sospecha y no se investigue.
Entonces la pregunta seria ¿Qué dio origen al suicidio? Acaso fue un episodio depresivo, alguna relación depresiva de origen sexual, amoroso, relaciones personales tóxicas, la reincidencia de extorsiones, chantajes, el miedo que no se puede superar de algún episodio vivido con anterioridad y del que no se le dio seguimiento correspondiente con alguna terapia.
En la participación de la criminalística, debe de hacerse con la mayor garantía de profesionalismo guiado por la ética y la deontología forense, permitiendo conocer todos los detalles encontrados en el escenario por muy sutiles que sean, ya que se puede tratar de recados póstumos, notas suicidas, llamadas telefónicas registradas en su teléfono celular, algún registro de actividad en sus redes sociales, citas y posibles lugares de algún encuentro romántico.
Recordemos que la criminalística se ocupa fundamentalmente de determinar de que forma se cometió el delito o quien lo cometió, no es nueva la idea de que a lo largo de los años muchos casos de supuesto suicidio al momento de ser investigado, resulta que los autores han tratado de disimular el móvil o circunstancias del evento, para hacer parecer un homicidio como si hubiera sido un suicidio y viceversa.
En estos casos es importante revisar todos los hallazgos de la necropsia que permitan dilucidar con mayor precisión la causa y tiempo de muerte, el tipo de heridas, en el supuesto de alguna estrangulación o lesiones de defensa, si éstas fueron producidas por un proyectil de arma de fuego, estableciendo el trayecto y trayectoria, en caso de haber recuperado en la escena recados póstumos será el área de grafoscopía quien determine si provienen de puño y letra del hoy occiso, en este orden de ideas y cómo podemos ver no es solo un simple suicidio, siempre habrá mucho por hacer en la investigación criminal.
No hay peor ciego a aquel que no quiere ver.
*Maestría en Ciencias Forenses y Victimología, perito criminalista, asesor forense y amante del ciclismo de montaña.