Radar económico y financiero | La gestión del agua en México: retos y desafíos
“El problema del acceso al agua en México es multifactorial; de orden financiero, técnico, y de gestión. Relacionado a la cobertura geográfica, a los usos y a la sobreexplotación. Que bueno que en zacatecas existe el interés de la legislatura por llevar ayer y hoy, dentro del esquema de parlamento abierto un foro de consulta en materia de Legislación Hídrica Estatal “
Raúl Rodríguez Márquez*
El uso eficiente del agua, su gestión efectiva y la conservación de los recursos son un factor determinante para el desarrollo social y económico del país. Sin duda esto es un tema estratégico y de seguridad nacional que debe de poner en el centro de la discusión nuevos enfoques y políticas que atiendan de manera prioritaria las brechas de desigualdad que existen, principalmente en la garantía de acceso al agua a millones de mexicanos que hoy en día no cuentan con el recurso.
Es común que los temas del agua adquieran relevancia en los tiempos de emergencia (sequías, inundaciones, fenómenos hidrometereológicos). No obstante, al ser un recurso que se usa para toda actividad humana y económica, presenta periódicamente problemáticas muy complejas que requieren de soluciones urgentes, y cuyo impacto en el mediano y largo plazos acentuará la desigualdad económica y social, con sus inevitables conflictos ciudadanos.
Con una población predominantemente urbana ,79% concentrada en 74 áreas metropolitanas, y solo el 21% es población rural dispersa en 185 mil comunidades, menores a 2500 habitantes.
Por ello resulta indispensable que en una sana discusión, en donde participen todos los sectores de la sociedad, se prioricen los mecanismos para hacer efectivo el derecho humano a este elemento de casi 10 millones de personas que carecen de acceso al agua potable y 13 millones de acceso al saneamiento. Esto es impostergable.
Se ha estimado que para lograr la cobertura total de agua y saneamiento en nuestro país, se requiere una inversión sostenida de 80,000 millones de pesos anuales durante un lapso aproximado de 10 años. Estas inversiones son impostergables dado que está en juego el desarrollo social y económico del país, y sin lugar a dudas se trata de un verdadero tema de seguridad nacional.
El agua, así como es un derecho humano, también representa desarrollo y crecimiento de las comunidades.
Es importante dimensionar la forma en que el agua se usa en México. De toda el agua que se consume: el 75.7% del agua se usa para el campo; el 14.7% se usa para las ciudades y es la que llega a nuestras casas; y el 4.9% se usa para la industria (según cifras de CONAGUA). Sin embargo, la deficiencia en el uso del agua es insostenible y poco ética.
El campo tiene pérdidas de hasta el 50% del recurso; pequeños y medianos productores agrícolas, sin programas de apoyo en uso eficiente del agua porque fueron eliminados del Presupuesto Federal, gastan volúmenes importantes y la desperdician a través de sistemas no eficientes de riego, es decir, aún se hace riego por inundaciones y hay poca transición al riego por goteo. Por otro lado, hay un brutal desperdicio del agua en las redes de distribución para los hogares que registran una tasa promedio de fugas del 46%, por lo obsoleto de las redes de distribución.
Esto refleja la necesidad de invertir en infraestructura hídrica, no sólo en el desarrollo de nueva infraestructura sino en el mantenimiento de la existente. Pero también muestra importantes áreas de oportunidad de eficientar el uso del agua tanto en el campo, los estados y los municipios, así como con el sector privado, para promover usos mucho más eficientes y planeados, que pongan en el centro la seguridad hídrica para el consumo humano.
Es importante reconocer que la productividad económica del sector industrial y agroindustrial del agua genera beneficios colaterales como la creación de empleo, el valor del producto por unidad de agua o el valor agregado del producto.
Inclusive, el agua para la producción de alimentos no sólo genera un beneficio desde el punto de vista económico, sino también genera beneficios para la seguridad alimentaria, la nutrición, brindar resiliencia a los medios de vida y en especial a los pequeños productores que se desarrollan en economías rurales catalogados en niveles de pobreza; además de apoyar la mitigación y adaptación al cambio climático y proporcionar servicios de agua.
Desde el Consejo Consultivo del Agua A.C. (CCA), hemos manifestado la necesidad de fortalecer el marco jurídico del agua para en primer lugar, atender el Derecho Humano al Agua, pero también para que la política pública y regulación del agua garanticen la seguridad hídrica, la conservación de los ecosistemas y el desarrollo económico y social.
Es necesario que hablemos ya de soluciones y no solo del diagnóstico de sobra conocido.
Hablemos de los 5 grandes desafíos del agua en México:
-Necesidad de mayor inversión en infraestructura hídrica y mantenimiento
-Atender el reclamo del derecho humano al agua en la ley reglamentaria
- La imperiosa necesidad de la seguridad hídrica
-Continuar con la agenda 2030 de la ONU, los objetivos de desarrollo sostenible
- Una mayor y mejor cultura en el cuidado y uso sustentable del agua
Necesitamos que el Agua en México no sea una fuente de conflicto y discordia, si no que se convierta en un eje de bienestar y desarrollo sustentable.
El destino ya nos alcanzó ¿Qué haremos al respecto?
*Analista político y financiero.
Presidente del consejo consultivo del agua.
*LAS OPINIONES PLASMADAS EN LAS COLABORACIONES SON RESPONSABILIDAD DE CADA AUTOR, ASÍ COMO SU ESTILO DE ESCRITURA. ECODIARIO ZACATECAS SÓLO ES UNA PLATAFORMA DIGITAL PARA DARLAS A CONOCER A SUS LECTORES.