Pasión por el deporte | Estrés Deportivo 

Pasión por el deporte | Estrés Deportivo 

“El estrés pude ser negativo y perjudicar la actuación de los deportistas, pero también puede producir un efecto positivo y empujar al deportista a entrenar y competir para mejorar”


José Ortega

Toda persona relacionada con el deporte sabe lo que es el estrés. Sin embargo, es algo difícil de encontrar una definición completa y sencilla de estrés. En psicología, se utilizan conceptos como ansiedad, presión, excitación, miedo, que forman parte o están relacionados con el estrés. 

En los deportistas el estrés puede aparecer de repente y durar un segundo o puede ser continuo, o lo largo de una temporada completa. El estrés puede causar en los deportistas un sentimiento desagradable, pero también puede producir un efecto agradable, como la intranquilidad que se siente ante la primera competencia. El estrés puede ser negativo y perjudicar la actuación de los deportistas, pero también puede producir un efecto positivo y empujar al deportista a entrenar y competir para mejorar. Todas las situaciones de estrés en los deportistas, su origen está en sus propios pensamientos, en su imaginación, y sus sentimientos.

Una característica principal del estrés en el deporte es la incertidumbre. No importa contra quien se compita, nunca se sabe por adelantado cuál será el resultado final de su competencia. 

Lo que se da en las mentes de los deportistas es el proceso siguiente: cuando el cerebro reconoce una situación de estrés, real o imaginaria, prepara el cuerpo para una reacción inmediata. En otra palabra, cuando un deportista se enfrenta a una situación amenazante, el cerebro transmite órdenes al cuerpo para que se prepare de inmediato para la amenaza o huir de ella. 

¿Qué ocurre en el organismo de un deportista en momento de estrés? El cuerpo se prepara automáticamente para reaccionar ante una situación de supervivencia. En este estado, las glándulas segregan varias sustancias en el organismo. Una de ellas es la adrenalina, cuya función es preparar los sistemas corporales para funcionar ante cualquier situación de entrenamiento o competencia. 

¿Pero qué siente el deportista cuando esto ocurre? En el cuerpo del deportista sufre cambios drásticos como subir la presión sanguínea y el corazón late más rápido para suministrar más sangre a los músculos, los niveles de azúcar también suben aportando más energía para un funcionamiento óptimo de los músculos implicados en el ejercicio específico de cada disciplina deportiva. 

¿Y qué sucede en las emociones, en el comportamiento y los pensamientos de los deportistas cuando son víctimas de estrés, pre, com y post competitivo? llegan a padecer una sensación de peligro y ansiedad, reacciones típicas de violencia y una disminución del umbral de reacción. Pero sobre todo perjudica la capacidad de concentración, así como, dificultades para tomar decisiones y una gran confusión. 

Todos estos cambios del estrés que se reflejan en el cuerpo y en los pensamientos de los deportistas, perjudican sin lugar a dudas la capacidad de rendir al máximo de su potencial.


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