La Familia | Ser mamá en la actualidad
“Ningún lenguaje puede expresar el poder, la belleza y el heroísmo del amor de una madre”
Edwin H. Chapin
Susana Sánchez*
En la cotidianidad nos encontramos con mujeres, madres de familia de diversas edades y estratos sociales que se preguntan acerca de su propia maternidad y de su rol como mamás, especialmente por el hecho de que, para muchas mujeres, este papel ha sido cuestionado y puesto en el tintero de muchos movimientos. Las respuestas a estas interrogantes parecen vincularse con la experiencia que generaciones anteriores nos han dejado, así como con la transmisión de las mismas.
Y es que, muchas veces, las que somos mamás no hemos sido muy claras al comunicar nuestras propias vivencias, y esto, claro, repercute en las siguientes generaciones, que, en su mayoría, prefieren retardar la maternidad o de plano, erradicarla de su vida. Sería muy benéfico hacer un ejercicio de interiorización que nos permitiera a las madres de hoy descubrir cómo hablamos hoy en día de la maternidad desde nuestro personal punto de vista y siendo muy objetivas, con razones y no solo con emociones, con fundamentos y con apertura sobre el tema. Siendo muy valientes para hablar de los retos que significa la maternidad y de la necesidad de estar preparándonos constantemente para profesionalizar –por así decirlo – nuestro rol de mamás. Mostrando la maravillosa experiencia del regalo tan grande que significa ser madre, de la felicidad que es tener hijos y compartiendo nuestra experiencia personal.
Estos aspectos aparecen como desafíos y al no tener claridad en la manera de afrontar la maternidad, surgen miedos, indecisiones y preocupaciones acerca de los procesos de ser madre y de la crianza de los hijos. Es entonces que el modo de ver la maternidad hoy en día, es muy distinto al de épocas anteriores, donde se daba por hecho que una mujer no se desarrollaba plenamente si no era madre.
Y esto no quiere decir que todas las mujeres tienen que ser madres, aunque biológicamente estamos diseñadas para serlo, existen muchas otras maneras de experimentar la maternidad sin necesariamente ser madres biológicas. Hoy en día podemos hablar de diferentes maternidades, no sólo la biológica, también la espiritual e incluso, podemos hablar de una maternidad emocional.
Una mamá se enfoca no solo en el desarrollo físico de sus hijos, a proveerlos materialmente de lo necesario o a educarlos, significa también abocarse a su crecimiento intelectual, emocional y espiritual, a formarlos integralmente. A reconocer en cada hijo a un ser humano perfectible, libre, amado y esperado.
Cada mamá está consciente del impacto que tiene la crianza en la vida de cada uno de sus hijos, en el gran aporte y significado que tiene este proceso, en la construcción de su personalidad y en el ejemplo que deja en su futuro. Cada mamá contribuye en gran medida en la felicidad de los hijos, especialmente en la niñez y en la adolescencia. Decía KIpling “infancia es igual a destino” y este concepto involucra en gran medida la participación de la madre en la vida de sus hijos.
No quiero hablar aquí del significado de la palabra madre, es un tema inagotable, sino más bien hacer una reflexión sobre el papel actual de la mujer que es madre y que se cuestiona su papel, su significado y sobre todo, su definición como persona.
Que sirva esta pequeña participación para reconocer y comprender a las madres de los tiempos actuales, siempre pendientes de los hijos, pero a la vez tratando de partirse en varios cachos para poder cumplir con su rol y buscando ellas mismas una vida plena que las lleve a su propia realización como mujeres. Mi respeto, mi admiración, mi sororidad y mi empatía con cada una.
¡Somos mujeres, somos únicas, somos felices y somos mamás! ¡Feliz 10 de mayo adelantado a cada una!
*Maestra en Educación Familiar
*Las opiniones plasmadas son responsabilidad de cada autor, así como su estilo de escritura. Ecodiario Zacatecas sólo es una plataforma digital para darlas a conocer a sus lectores.
