Autonomía económica de las mujeres | Las juventudes
“Los principales problemas, además de la pobreza, son aquellos que tienen que ver con acceder a un empleo formal…”
María del Carmen Salinas*
Hace un par de días estuvimos conmemorando el Día Internacional de la Juventud, todos los 12 de agosto de cada año se celebra gracias a una iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas en 1999 como una manera de crear conciencia sobre la importancia de los problemas, desafíos y necesidades de los jóvenes de todo el mundo.
Actualmente tenemos a la población juvenil más grande de la historia. Según datos de la ONU, en el mundo hay unos 1800 millones de jóvenes con edades comprendidas entre los 10 y los 24 años. Este grupo poblacional es un colectivo frágil que hay que proteger, muchos de ellos viven en zonas de conflicto o en condiciones muy precarias.
Cada año se decide un tema para celebrar el Día Internacional de la Juventud y para el año 2023 dicho lema fue: “Celebrando las maneras en que los jóvenes lideran como agentes de cambio para los objetivos mundiales”. La campaña se centra en destacar la creatividad, el ingenio y fomentar el uso de las capacidades de los jóvenes y hacer con ello del mundo un lugar mejor.
Para eso debemos mencionar que tan solo en México se calcula que hay más de 30 millones de jóvenes, donde el problema que más predomina es la pobreza pues más de la mitad de esa población vive en esa situación.
La mayoría de estos jóvenes incluso sufre discriminación solo por ser jóvenes, o si no es por su color de piel, por el lugar de donde vienen, el sitio donde estudiaron, etc., estos jóvenes son relegados de espacios de oportunidades que los lleven a mejorar sus condiciones de vida perpetuando con ello el circulo de pobreza y haciendo el rezago más grande.
Los principales problemas, además de la pobreza, son aquellos que tienen que ver con acceder a un empleo formal, bien remunerado y con prestaciones laborales, el acceso a un servicio de salud, educación y combate a la violencia que sucede no solo en los hogares sino también en las comunidades. Por lo cual el trabajo a realizar para todos ellos no es poco, es pues importante resaltar medidas no solo de tratamiento, sino de prevención, así como políticas sociales que premien su esfuerzo y dedicación, que abran puertas a mejores condiciones sociales para todos ellos.
Es importante destacar que hoy en día hay diversas becas que promueven que ellos aprendan un oficio o bien, garantizar un primer empleo con las prestaciones correspondientes. Por lo cual creo que hay todavía un largo camino por recorrer, pero camino que sin duda se caminará con entusiasmo, tesón y trabajo.