Andar las vías | Inseguridad e incertidumbre
“Todavía no podemos salir del covid, y ahora nos notifican otras dos epidemias…”
Luna Morena*
Sin haber digerido una noticia triste, aparece otra, y muchas más en este mundo, que creyéndose todo poderoso, fue dominado por un bicho que no se sabe de dónde vino. Los sabelotodo aseguran que fue creado por habilidades malas para un fin ya destinado, pero que al momento de dirigirlo, se les fugó de las manos emprendiendo un transitar de vida y muerte, hasta lugares nunca imaginados. Después de más de dos años de vivir vigilados, todavía no podemos cantar victoria, ni ablandar nuestra defensa, porque seguimos siendo observados; así que a nadie se le ocurra decir o asegurar que al fin somos libres. Decirlo y además asegurarlo, claro que lo podemos hacer, pero que sea verdad; aún es imposible, puesto que falta tiempo para poder expresarlo, además todos los días en los noticieros, nos enteramos que los contagios continúan, aunque en menor cantidad, pero continúan.
Todavía no podemos salir del covid, y ahora nos notifican otras dos epidemias cuya manera de manifestarse no se asemejan en nada entre ellas, pero igual, son una amenaza para la humanidad porque también te pueden curar de vivir. Ante estas novedades tristes y desagradables, es bien importante escuchar una información confiable, y no creer en el sensacionalismo, ese que anda del tingo al tango solamente provocando un pánico innecesario entre los hipocondriacos, los del miedo fácil, los volubles, y los que faltan en la lista.
Desde luego que nos entristece y nos asusta escuchar noticias de este color, sobretodo porque la pandemia que nos pusiera bajo una cuarentena nunca vista, sigue contagiando personas, por eso se nos pide seguirnos cuidando como desde el principio. Por nuestro bienestar y el de todos decidimos hacerlo, sabiendo que las medidas de higiene, se llevan bien con nosotros, y con la salud de la humanidad.
Es necesario continuar informados, para saber certeramente lo que se diga de las nuevas infecciones, que hasta ahora hemos visto únicamente entre los medios informativos. Dios permita que sea todo lo que apenas empezamos a ver; y no llegue hasta el punto de multiplicarse ahora; solo hasta que los conocimientos descubran el poder para vencer la ya anunciada hepatitis infantil, y la viruela del mono. Hasta el momento, los especialistas siguen informando confiablemente, que el haber sido vacunados desde pequeños contra la viruela, nos da una protección del 85%, pidiéndonos también, dejar de consumir alimentos singulares.
De la hepatitis infantil, hoy llamada también enfermedad misteriosa, o nueva enfermedad; hasta estos días se desconoce lo que la provoca, pero los síntomas pueden ser identificados fácilmente, por los papás que conozcan muy bien a sus hijos. No podrá pasarles desapercibido, si el niño o la niña llegaran a presentar un color amarillento en la conjuntiva de sus ojos, en su piel y las mucosas, asociado a esto; vómito y dolor abdominal. Con estos síntomas, cuatro niños detectados en el Estado de Nuevo León se encuentran internados con extrema vigilancia médica, para estar al pendiente de su evolución con el tratamiento que se les está administrando. Hasta el momento según lo informado por la Secretaría de Salud, permanecen estables, sin presentar un padecimiento mayor que pueda alarmar al personal de salud, y principalmente a los papás de los pequeños.
Es importante comentar, que Ecodiario cuenta con fieles lectores, uno de ellos (admirador de la Lic. Tanya Marina) ante estas nuevas contingencias, por contar con dos guapísimos nietos hace el siguiente comentario:
“¡Cuándo volveremos a decir buenos días! Porque de buenos hace mucho que no tienen nada. Todavía no salimos de la cuarentena de covid, y ya tenemos encima otras dos epidemias, la hepatitis infantil, y la viruela del mono. ¿A qué se debe esto? ¿Acaso castigo de Dios por nuestros vicios y nuestros pecados, o porque algo sádico que goza con el dolor y el sufrimiento de la humanidad, sigue sediento de sangre y muerte? ¿Dónde está esa frase hueca de que Dios es amor, cuando se recrea con el dolor y las lágrimas de las madres, al perder a sus hijos por estas “divinas” pandemias? ¿Serán el principio del fin del mundo, o tienen otra explicación? Que “Dios” nos proteja”. Saludos.
*Escritora, poeta y promotora y difusora de la cultura. Soy tres estuches de monerías y casi un montón de cosas.
**Las opiniones plasmadas en las colaboraciones son responsabilidad de cada autor, así como su estilo de escritura. Ecodiario Zacatecas sólo es una plataforma digital para darlas a conocer a sus lectores.