UNO DE LOS REOS FUGADOS HABÍA SIDO RECAPTURADO; CONTINÚA SU BÚSQUEDA
Ecodiario
ZACATECAS, ZAC.- Uno de los 7 reos que se dieron a la fuga del Cerereso de Zacatecas, es la segunda ocasión que evade la seguridad del penal para escaparse.
Se trata de Natividad Alvarado García o José Manuel Rivera García, que de acuerdo a la ficha emitida por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) para su localización, se trata de hombre de 40 años de edad, originario de Mapimi, Durango y quien estaba interno por el delito de secuestro.
De acuerdo a Adolfo Marín, titular de la Secretaría de Seguridad Pública, este sábado se escaparon 7 personas, entre ellos Natividad, aproximadamente a las 16:20 horas, “al parecer por uno de los muros del centro penitenciario”.
La fuga anterior de Natividad se registró el 14 de julio de 2017, en ese entonces Marco Vargas, vocero de la Secretaría de Seguridad informó que el escape se dio cuando el reo cortó con un cable de acero uno de los barrotes de su celda para salir y posteriormente con cobijas atadas escalar las bardas perimetrales y escapar del centro penal.
En ese momento se dieron cuenta de la ausencia del sentenciado cuando en el pase de lista de no se encontraba en el lugar.
De acuerdo a lo informado en aquella ocasión por Marco Vargas, Natividad estaba preso por el delito de portación de arma de fuego de uso exclusivo del Ejército Mexicano y había ingresado a este penal en diciembre de 2016.
Fugas han sido constantes en el Cerereso de Zacatecas
El Cerereso de Zacatecas durante los últimos años también ha sido escenario de diferentes fugas de internos quien han utilizado diversas tácticas, las más conocidas corresponden al año del 2020 y 2009.
El 6 de mayo de 2020, el Cerereso de Zacatecas registró la evasión de 12 presos quienes lograron abandonar el penal por medio de un túnel clandestino que construyeron del interior al exterior.
Pero también, unos meses antes, entre el 31 de diciembre y 2 de enero, se registraron dos riñas que provocaron la muerte de 17 sentenciados y 10 heridos, los propios internos utilizaron armas de fuego.
La fuga más conocida corresponde a la de 53 internos el 16 de mayo de 2009, cuando un comando armando de la delincuencia organizada, compuesto por varios vehículos a los que colocaron logotipos de la entonces Policía Federal Preventiva (PFP) y Agencia Federal de Investigaciones (AFI) arribó al penal para liberar a los internos, sin que los custodios pusieran resistencia.
