HOMENAJEA LA BANDA SINFÓNICA A FERNANDO VILLALPANDO
TEXTO Y FOTOS: ESTHER CONSUEGRA DÁVILA
ZACATECAS, ZAC.- La Banda Sinfónica del Estado de Zacatecas rindió homenaje con un concierto a Fernando Villalpando, en el marco del 180 aniversario de su natalicio. El evento tuvo lugar en la calle que lo vio nacer y que lleva su nombre, celebrando a uno de los hijos pródigos de Zacatecas y México en materia musical.
La explanada del Congreso del Estado fue el escenario donde, bajo la dirección de Salvador García y Ortega, la Banda del Estado rindió tributo durante una hora al autor de “Las Horas Felices”. Villalpando es reconocido mundialmente por la composición de la "Marcha Fúnebre de González Ortega", interpretada en funerales de generales y jefes de estado del siglo XIX en países como Estados Unidos, Rusia y Alemania, entre otros.
El evento incluyó un programa especial en el Sistema Zacatecano de Radio y Televisión (Sizart), conducido por Yadira Rivera de Enfoque Cultural. La soprano internacional Sheila López participó en el programa musical, que también contó con intervenciones académicas e historiográficas de Federico Priapo Chew, cronista del Estado; Conrado Briseño, cornista de la Banda Sinfónica; y Alfonso Vásquez Sosa, músico y universitario.
Priapo Chew mencionó que Fernando Villalpando fue director de la Banda Municipal de Zacatecas y violín concertino de la orquesta de la Compañía Mexicana de Ópera Italiana en 1867. Además de su participación en la Banda Municipal, formó una orquesta que llegó a ser reconocida como una de las mejores de la república. Las compañías de ópera que llegaban a Zacatecas encontraban en esta orquesta una facilidad excepcional para preparar sus ensayos, gracias a la dedicación de Villalpando.
Villalpando nació el 30 de mayo de 1844 en la ciudad de Zacatecas, en la calle de los Gallos, posteriormente llamada Galeana, y ahora lleva su nombre. Sus padres fueron Ignacio Villalpando, un comerciante, y Victoria Ávila. A los 11 años, se incorporó como músico en el Segundo Batallón de Zacatecas, bajo el mando del general Jesús González Ortega y la dirección musical de Juan Nepomuceno Rosales, su primer y casi único maestro.
