GOBIERNO DEL SOCIALISTA DANIEL ORTEGA ORDENA CIERRE DE IGLESIAS CATÓLICAS
Ecodiario
MANAGUA, NICARAGUA.- El sacerdote nicaragüense Aníbal Manzanares denunció que la Policía Nacional le ha prohibido salir de su parroquia, en el municipio de Terrabona, departamento de Matagalpa (norte), en medio de tensiones entre la Iglesia católica y el régimen del presidente Daniel Ortega.
“Mis buenos amigos y hermanos, solamente notificarles que la Policía esta mañana me ha notificado que no tengo permiso para salir, no puedo salir a las calles, a procesiones, a actividades fuera del templo parroquial, así que creo que me están vigilando”, dijo el sacerdote Manzanares, de la parroquia San José, en un mensaje grabado el miércoles, y distribuido este jueves en sus redes sociales.
“La iglesia católica es la (institución) más creíble, de confianza y credibilidad en la población. El sitio al obispo Álvarez es un episodio más en el forcejo y represión que Ortega y (su esposa y vicepresidenta, Rosario) Murillo están ejerciendo para que se pliegue a sus posiciones”, dijo a la agencia AFP la socióloga Elvira Cuadra.
“Tienen una relación de confrontación abierta contra la iglesia desde 2018 y antes, en 2014, cuando la Conferencia Episcopal (CEN) hizo pública una carta que contenía puntos fuertes sobre la institucionalidad y rumbo del país. Esa carta fue ignorada y molestó mucho a Ortega”, recordó Cuadra.
Ortega, un ex guerrillero de 76 años, gobierna desde 2007 y es acusado de corrupción y nepotismo por sus rivales, lo cual él niega al asegurar que está restituyendo derechos que fueron quitados a los nicaragüenses durante los gobiernos neoliberales que les antecedieron.
“Vamos adelante. Sabemos que el porvenir nos pertenece, un pueblo que no se dejará, jamás, nunca más, arrebatar la paz”, acostumbra a decir Murillo, en sus alocuciones cotidianas de mediodía en medios afines a su gobierno.