EXHIBEN HIERROS FORJADOS EN EL MUSEO ZACATECANO
Ecodiario
ZACATECAS, ZAC.- Una de las colecciones “semilla” que integraron desde su nacimiento (1995) los acervos del Museo Zacatecano es la de Hierros Forjados Coloniales, la cual es exhibida en un espacio arquitectónico que en 1808 fue diseñado para utilizase como almacén de carbón, cuando el edificio sede de este museo fungía como Casa de Ensaye y Moneda.
El eminente historiador del arte mexicano Guillermo Tovar de Teresa (1956-2013), a sabiendas de la intención de crear un museo, por parte del Gobierno del Estado, donde pudieran ser expuestos objetos íntimamente relacionados con la historia e idiosincrasia zacatecana, tuvo a bien donar un conjunto de 65 ejemplares de hierro forjado que su padre, el médico Rafael Tovar Villa-Gordoa (1914-1968), había reunido a lo largo de su vida.
Su datación va del siglo 17 al 18; son de diversa procedencia y para su exhibición se clasificaron en tres grupos básicos: el primero, relacionado con el ejercicio de la monta a caballo; el segundo se integra por piezas que formaron parte de arcones, baúles o armarios; y el tercero es una miscelánea relacionada con el desarrollo de actividades cotidianas como los eslabones “de chispa”, para crear fuego, o un fierro para marcar libros.
Cada ejemplar refleja la habilidad y arte que poseyeron los talleres de fragua novohispanos; sus primeras obras fueron de carácter militar en los años de la conquista; poco a poco, de la factura de armas se pasó a la de herramientas; en su caso, para Zacatecas, en los siglos 16 y 17 la actividad herrera se concentró en las necesidades de la minería.
Sería hasta el siglo 18, bajo un mestizaje consolidado, y la libertad creativa propia del barroco, que las manufacturas en hierro adquirirían sensacionales formas, todas con sus particulares retos y secretos técnicos.