FEMINICIDIOS Y DESAPARICIONES TIENEN QUE PARAR: PONIATOWSKA EN SU HOMENAJE
Ecodiario
La Sala Principal del Palacio de Bellas Artes se llenó hasta el tercer nivel durante la conmemoración por los 90 años de la escritora.
CIUDAD DE MÉXICO.- Entre amigos, familiares, invitados y prensa, hacía mucho que un personaje literario no convocaba a tanta gente en el Palacio de Bella Artes.
Fue la escritora Elena Poniatowska en su homenaje nacional –y en vida– en su 90 aniversario quien lo hizo. La Sala Principal del recinto de mármol se llenó hasta el tercer nivel.
La autora, quien suele dar cátedras de anécdotas, hizo lo propio hace un mes en el marco de la Fiesta del Libro y la Rosa de la UNAM, institución que también la homenajeó. Ahora tocó el turno a la Secretaría de Cultura federal, a través del Instituto Nacional de Bellas Artes en colaboración con el gobierno de esta ciudad, que preparó una serie de actividades artístico-culturales para la Premio Cervantes (2013) y Medalla Bellas Artes (2014): “Elenísima, 90 años”, conformado por un programa de mano con 15 actividades.
La llegada de la homenajeada al palacio, puntual al mediodía, vino con una Sala Principal que la recibió de pie y con un minuto de aplausos y vítores.
En primeras filas la recibieron sus hijos, Emmanuel, Felipe y Paula, y sus diez nietos, además de la secretaria de Cultura, Alejandra Frausto; el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón; la secretaría del Trabajo, Luisa María Alcalde Luján; el titular del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano, Jenaro Villamil (en representación del presidente Andrés Manuel López Obrador); la jefa de gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum; el senador Héctor Vasconcelos; entre otros personajes del gremio cultural como el flautista Horacio Franco y el titular de Coordinación de Memoria Histórica y Cultural de México, entre otros.
La primera en tomar el estrado fue Alejandra Frausto quien aseveró que en medio de un coral de voces y artistas de diversas generaciones es el momento de homenajear y celebrar a la “princesa que decidió caminar por la tierra como escritora y periodista”. Tras ello Claudia Sheinbaum recordó que al preguntarle directamente a Poniatowska cómo quería celebrar sus 90 años, la referencia indudable fue “recordando a los protagonistas de sus historias, a las mujeres y sus testimonios”, e hizo un breve recordatorio sobre el significado de “La noche de Tlatelolco” (1971) para la historia de México.
Después llegó el turno de Jenaro Villamil, quien recordó en 2005 cómo Carlos Monsiváis le llamó molesto para quejarse de un comercial en donde se escuchaba una voz en off de Poniatowska que los panistas difundieron en el comercial ‘Peligro para México’ contra la primera campaña presidencial de López Obrador. “Monsi me recordó: ‘Elena es mucha pieza, va a sobrevivir a eso y más, no entienden que cuanto más la ataquen, más fuerza y vida le dan… Si no ganan van a sembrar el miedo, y si lo hacen la muerte’, me refirió casi proféticamente”.
Tras ello se vinieron las actividades en racimo, transmitidas por el Canal 22 y las redes sociales de cultura: audiovisuales con lecturas de fragmentos de libros de Poniatowska a cargo del biólogo Antonio Lazcano, de Ignacia Rodríguez “La Nacha”, y la periodista Paula Mónaco. Palabras de Martha Lamas y María Teresa Priego; lecturas dramatizadas (a partir de “El amante polaco”) a cargo de la Compañía Nacional de Teatro, actos escénicos por parte de niños y adolescentes del Semillero Creativo de Teatro del Estado de México, Tenancingo (Tlaxcala), y Monclova (Coahuila).
Esto ultimo con música en vivo a cargo de la Orquesta Escuela Carlos Chávez, encargada de interpretar ‘Conga’ del Fuego Nuevo de Arturo Márquez; el tema de estreno “Es Elena Poniatowska”, de Liliana Felipe, con la artista al piano y Jesusa Rodríguez en la voz; y el “1, 2, 3, qué paso más chévere” de Rafael Ortíz.
Tras subir al escenario y agradecer a los asistentes, Poniatowska recordó a sus amigos Carlos Monsiváis y José Emilio Pacheco, y se dijo conmovida por la celebración. Para concluir la orquesta interpretó las clásicas “Mañanitas”, tiempo durante el cual la escritora partió uno de los dos pasteles que se hicieron en su honor, el más grande de seis pisos, mismos que se partieron y compartieron con todos los asistentes en el vestíbulo del palacio.
Luego de que se instalara una mesa en ese espacio donde la gente la felicitó, se acercó brevemente a la prensa para responder a algunas preguntas:
“Los feminicidios y desapariciones tienen que terminar –dijo –, se necesita la protección a las mujeres, una campaña ciudadana para evitar agresiones”.
–¿Ha fallado el Estado mexicano? –se le cuestionó. “Sí” respondió la escritora.
Este día Andrés Manuel López Obrador, quien se disculpó durante la conferencia mañanera por no asistir a su homenaje, expresó:
“No voy a poder asistir a su homenaje, pero es, sin duda, la mejor escritora de México. Ofrezco disculpas, para que no haya celos y sentimientos.
“Conjuga dos elementos: el trabajo intelectual y el amor a la gente, a los demás, y eso es muy difícil, porque hay grandes escritores, mujeres y hombres, pero no le tienen mucho amor al pueblo y hay quienes tienen mucho amor al pueblo, pero no escriben bien y aquí son las dos cosas”.